El Ayuntamiento de Daimiel sigue en alerta pese a que este viernes el riesgo bajaba ostensiblemente al tiempo que retornaba buena parte de las aguas al cauce del Azuer a su paso por Daimiel. A primera hora de la tarde la cota había descendido una media de 25 centímetros, gracias a la tregua meteorológica. Una de las decisiones fue reabrir al tráfico el camino que une el casco urbano con el molino de La Máquina. Sí se mantendrá cerrada la entrada a Daimiel desde Manzanares y Puerto Lápice por el Paseo del Carmen.
El Ayuntamiento insiste en su recomendación de evitar desplazamientos por estas zonas, sobre todo aproximarse a las riberas del río Azuer y el Guadiiana. Como apuntaba el concejal Ramón Ruiz de la Hermosa, "los visitantes podrían encontrarse con sorpresas como alguna abertura o remolino". De hecho el Guadiana camino a Zuacorta circula por cauces secos desde hace 30 años sobre subsuelo inestable consumido por la autocombustión de turberas.
No obstante, el fin de semana, en principio, no se darán las condiciones idóneas para plantear desplazamientos o visitas rurales ya que el Instituto Nacional de Meteorología advierte de rachas de viento que oscilarán entre los 100 y 120 kilómetros por hora en la provincia. De igual modo, se prevén lluvias en los próximos días, aunque no abundantes.
Los servicios municipales siguen pendientes de las noticias que lleguen de los arroyos de la Alambra y Campanario que desembocan en el Azuer en La Solana y San Carlos del Valle, respectivamente. El aviso de lo que allí sucede se advierte en el camino del Carrerón, a ocho kilómetros del casco urbano. Por tanto, la crecida no sólo depende de la apertura de las compuertas del pantano Puente de Vallehermoso, sino de que "las lluvias nos concedan una tregua", apuntaba Ruiz de la Hermosa.
Nivel de agua y acuífero
De continuar sin chubascos, el nivel de los desbordamientos seguiría descendiendo. A ello ayuda la actuación del jueves por la mañana en el molino de La Máquina donde se amplió el cauce procedente de Zuacorta para que las aguas del Azuer corran río atrás ganando terreno al Guadiana. Curso, que se sitúa a kilómetro y medio, es decir, a mitad de camino.
Desde Aquagest, empresa encargada del servicio de aguas en Daimiel y de la medición del acuífero en los Ojos del Guadiana se tiene cuantificada la subida del nivel freático. Si en el mes de enero se fijaba en 30 metros y 40 centímetros de profundidad, en febrero ya se ha notado una subida hasta los 28 metros y ochenta centímetros por lo que los niveles freáticos se han recuperado casi dos metros en un mes.