El colegio concertado de Villarrubia de los Ojos participa en una reunión para exigir igualdad con respecto a los públicos
Los directores de casi una veintena de instituciones católicas de la provincia debatieron en la capital acerca de sus principales problemas.
15/04/2010
La ronda de reuniones prevista por la Asociación de Escuelas Católicas de Castilla-La Mancha, que aglutina a 90 centros y más de 43.000 alumnos en la región, llegó ayer a Ciudad Real. En concreto casi una veintena de directores de los diversas instituciones concertadas de la provincia se reunieron en el colegio 'Hermano Gárate' para acercar posturas en lo que respecta a los principales problemas de las mismas.
En dicha cita estuvieron presentes varios colegios de Villarrubia de los Ojos, Tomelloso, Puertollano, La Solana, Daimiel y Valdepeñas, así como los centros San José, San Francisco de Asís, Marianistas y Hermano Gárate de la capital.
Uno de los motivos de la reunión, como ya adelantó el pasado sábado La Tribuna, fue la implantación del programa Escuela 2.0, iniciativa que lleva a cabo el gobierno de la nación en colaboración con las distintas autonomías y que pretende que todas las aulas cuenten con las últimas novedades tecnológicas educativas.
En este sentido, los directores de los centros concertados esperan un «trato igualitario» para sus alumnos con respecto al resto de estudiantes de la escuela pública, ya que a pesar de que los mismos, en el caso de los chicos de Quinto de Primaria, han recibido sus correspondientes ordenadores portátiles, encuentran que sus clases no cuentan con las pizarras digitales, los videoproyectores correspondientes o la instalación necesaria para disponer de señal wifi.
El director del colegio Salesiano Hermano Gárate, Joaquín Torres, destacó a este periódico que «el motivo de la reunión no es ni mucho menos crear polémica entre las escuelas públicas y las concertadas, sino que lejos de cualquier tipo de confrontación lo único que esperamos es que cese un trato, que bajo nuestro punto de vista, resulta discriminatorio para nuestros alumnos; pues éstos no pueden disfrutar de l programa Escuela 2.0 con los mismos medios que los estudiantes de otros centro de la región».